¡Hola, Habbit@s! O quizá debería decir adiós… Ha llegado el momento de
despedirme, un momento agridulce, como cuando llega la cuenta en un bar: triste porque todo termina, pero gratificante porque te quedan los recuerdos de lo vivido.
Este camino ha sido una experiencia única, diferente a cualquier otra en el hotel.
Desde el inicio, idear y elegir la sala con la que participar fue como mirar la carta de un restaurante, lleno de dudas sobre qué escoger para deleitarse ese día. Luego, vino ese gran evento que evocaba recuerdos de otras generaciones, como si de entremeses se tratara, buscando la combinación perfecta para picotear un poco de cada una.
El primer plato fue la MawGranja, donde disfrutamos de un concierto de villancicos en vivo, saboreando cada concurso y la apertura de regalos. El plato fuerte fue el MawCircus, un evento espectacular en el que, como en un restaurante, tenías que elegir entre carnes, verduras o pescado, aunque en este caso la elección no era tuya. Todo acompañado de una guarnición de retos y juegos variados.
Luego vino el evento del Día del Libro, un aperitivo final, pequeño pero sustancioso, sacando a la luz todo el conocimiento que nos brindan los libros. Después, el MawDojo, con sus antónimos, como el café, que cada uno prefiere a su manera: caliente o con hielo. Y para terminar, el gran postre de la Expedición Maw, algo que, como todo buen postre, quedará para siempre en mi memoria.
Todo esto lo he compartido con mis compañeros de mesa, Albertsolber y Lushin, con quienes he disfrutado cada momento de este festín, siempre bien atendidos por nuestros staffs.
Ahora, antes de despedirme, quiero dar las gracias. Gracias a cada persona que me ayudó con consejos de construcción (no era mi punto fuerte), a mi fansite Habtium por facilitarme el trabajo, a las demás fansites que nos ayudaron en la difusión de los eventos, a los diseñadores que colaboraron con imágenes y placas, a los staff que hicieron posible nuestras ideas, y, por supuesto, a mi equipo Maw, que me hizo sentir siempre en casa, y a cada usuario que disfrutó de los juegos y nos felicitó por nuestro trabajo ya que sin ustedes, todo este trabajo no tendría sentido y el veros disfrutar, es lo que nos llena de ilusión.
Antes de cerrar esta carta, quiero confesar algo: durante todos estos eventos, hubo momentos en los que estaba tan perdido en la construcción que me sentía como un arquitecto sin planos, a punto de construir una torre inclinada (Yo soy más programador que constructor). Menos mal que mis compañeros estaban ahí para rescatarme, como auténticos ingenieros de emergencia, evitando que los muros terminaran siendo un laberinto imposible. Así que, si alguna vez te pareció que una sala tenía un diseño curioso, ya sabes quién estaba detrás… ¡Pero lo importante es que lo pasamos en grande y las risas nunca faltaron! PD: Les hice demasiadas bromas en las construcciones, como desmontarle salas una vez terminadas… ¡Tranquilos, las tenía programadas para que se reconstruyeran solas! ¡Que sustitos les daba!
Con todo esto, solo me queda decir GRACIAS a todos por esta oportunidad. Nunca la olvidaré, y espero que la próxima generación venga aún más fuerte. ¡Larga vida al MAW!
¡Hasta pronto! Nighmare4 … 3, 2, 1… BOOM (¡Cañonazo!)